Una mujer vendía rosas por 1 dólar cada una en el metro.
De repente, un chico se acerca a ella y hace algo que dejó a todos los pasajeros del vagón boquiabiertos.
Entonces, el chico hizo rápidamente la cuenta matemática y le dijo: “entonces, ¿puedo comprarlas todas por 140 dólares?”.
La mujer, en un principio, no entendía cuáles eran las intenciones de aquel desconocido.
¿Quería comprar todas las rosas y llevarlas a regalar a alguien en especial?
Pues no. La intención del hombre no era otra que… ¡regalarle las rosas a ella! “Te las compro y tú las repartes, ¿de acuerdo? No las vendas, dáselas a la gente”.
La mujer se pone a llorar desconsolada. “No, es un día feliz”, le responde el hombre. Y tras esto, se bajó del metro y dejó a la mujer llorando de emoción.
Aquí tienes el vídeo:
¡Qué buen gesto desinteresado el de este chico! A la mujer le alegró el día, sin duda. Esperamos que sirva de ejemplo para mucha gente más.
